La MUTABLE y sacrosanta "Sana Doctrina"


Por el Padre Canalillo


Hoy Francisco, el Santo Padre, ha estado "sembráo", pero de verdad y como era de esperar en el búnker se rasgan las vestiduras.

A Francisco se le ha ocurrido decir lo siguiente: "...también nosotros los católicos tenemos gente cerrada que no quiere, que dice que los ortodoxos son cismáticos. Son cosas viejas. Los ortodoxos son cristianos. Hay grupos católicos un poco integristas. Debemos tolerarlos, rezar por ellos, porque el Señor con el Espíritu Santo ablande. Pero yo he rezado los dos, no he mirado a Daniel pero creo que él también lo mismo."

Y ¿por qué es importante esta declaración? ¿Por que llama carcas a los carcas? No. Por eso también pero no se puede premiar al papa por decir lo obvio.¿Por qué entonces es tan crítico para los integristas que el papa se manifieste de esta manera?

Pues porque el integrismo ultra tiene dos axiomas que defiende a machamartillo: el primero que "Fuera de la Iglesia no hay salvación" y el segundo que "la sacrosanta doctrina de la Iglesia no ha cambiado nunca"

No hay que insistir en que el primero de los dos axiomas para un hereje no tiene fundamento pero  abundemos un poco en el segundo. (este post será un poco más largo que los otros)

¿Es cierto que la doctrina de la Iglesia es inmutable, que los dogmas no han cambiado....? 

Hagamos un poco de memoria.

- Arrianismo: Durante cerca de 100 años, la Iglesia estuvo discutiendo si era arriana o no era arriana. 

Lo de menos es qué es lo que  Arrio defendía, lo que nos ocupa es que en el concilio de Nicea (325) se condenó la doctrina de Arrio, pero en el sínodo de Tiro se le exoneró y murió siendo considerado ortodoxo (Arrio era presbítero en Alejandría), para una vez muerto ser de nuevo anatemizado por la insistencia de Atanasio (por eso los ultras se consideran a si mismos como Atanasios) en el Concilio de Constantinopla (381).

Es decir que un día del año 381 la Iglesia se levantó arriana y se acostó atanasia.

- El Limbo: El Concilio de Cartago (418) pone a los niños sin bautismo y con solo el pecado original en una situación de condenación (DS 224). A continuación, la tradición teológica distinguirá entre los que están privados de la gracia de la salvación por causa del pecado original y los que se han alejado de ella culpablemente.
En los años 2005 y 2006 el tema fue discutido por la Comisión Teológica Internacional en dos reuniones generales, del cual se constituyó el documento sobre sus consideraciones titulado “La esperanza de salvación para los niños que mueren sin bautismo”
Posteriormente, el Cardenal William Levada, presidente de la Comisión, con el “consentimiento” del papa Benedicto XVI aprobó la publicación del texto. 
En el mismo se aclara que dicha misiva no pretende ser considerada en todas sus partes como un acto del magisterio católico. Sin embargo, éste ofrece continuas referencias a textos de la Escritura, Tradición y del Magisterio de la Iglesia, proclamándose lo siguiente a través del Papa“No siendo la existencia del Limbo una verdad dogmática, sí es una hipótesis teológica, y por tanto, no quita la esperanza de encontrar una solución que permita creer, como verdad definitiva, la salvación de los niños que mueren sin haber sido bautizados”
Es decir que nuestros abuelos se murieron creyendo en la existencia del limbo y ahora la Iglesia, no sabe o no contesta o vaya usted a saber que.

- Condenación de los no bautizados: El Papa Eugenio IV  afirmó (Cantate Domino, 1441): “La Iglesia Católica firmemente cree, profesa y predica, que ninguno de los que existen fuera de la Iglesia Católica, no solo paganos, sino también judíos, herejes y cismáticos, puedan tener una participación en la vida eterna, sino que van a entrar en el fuego eterno que fue preparado para el diablo y sus ángeles “.Ahora no es así, judíos, herejes, cismáticos y paganos pueden ir al cielo.

- Conciliarismo: Dos concilios, el de Constanza y el de Basilea determinaron que la autoridad suprema de la Iglesia era el concilio, aunque al final en el concilio 5º de Letrán se impuso la idea de que el papa tenía la última y suprema palabra.

- Libertad de conciencia: También hay que tener en cuenta cómo el Concilio Vaticano II en su "Dignitatis humanae", corrige a Gregorio XVI en su encíclica "Mirari vos" y a Pío IX en la encíclica "Quanta cura" y su famoso "Syllabus", en lo referente a la libertad de conciencia y el derecho a cambiar de religión.

"Por muchas vueltas que le demos, no se puede evitar una conclusión: esta doctrina del Vaticano II [sobre libertad religiosa] es lo que Pío IX condenó en su encíclica Quanta cura".
(M. Rhonheimer, "Cristianismo y laicidad. Historia y actualidad de una relación compleja").

+ Mirari Vos, 1834 ”De esa cenagosa fuente del indiferentismo mana aquella absurda y errónea sentencia o, mejor dicho, locura, que afirma y defiende a toda costa y para todos, la libertad de conciencia. Este pestilente error se abre paso, escudado en la inmoderada libertad de opiniones que, para ruina de la sociedad religiosa y de la civil, se extiende cada día más por todas partes”

+ Dignitatis Humanae, 1965 “La persona humana tiene derecho a la libertad religiosa. (...) todos los hombres han de estar inmunes de coacción, tanto por parte de individuos como de grupos sociales y de cualquier potestad humana, y esto de tal manera que, en materia religiosa, ni se obligue a nadie a obrar contra su conciencia, ni se le impida que actúe conforme a ella en privado y en público, sólo o asociado con otros, dentro de los límites debidos”.

Luego tengo dos opciones:

a) Mirari Vos y/o Dignitatis Humanae no gozan de infalibilidad, ergo pueden ser desobedecidos, ergo no son Doctrina.

b) La doctrina cambia.

- La Doctrina Social de la Iglesia: Esta siempre ha estado en diálogo con capitalismos y
colectivismos. Ese diálogo ha pasado por cinco grandes pasos:

El primero, la condena: Tanto León XIII como Pío XI condenaron sin ningún miedo capitalismo y colectivismos; no tengáis la idea equivocada de que sólo se meten con los marxistas porque no es cierto; a los capitalistas les lanzan acusaciones que en algún momento a mí me ha parecido exageradas.

Juan XXIII se dio cuenta de que con la condena no se va muy lejos, y adoptó la distancia respetuosa en la que le siguió el Concilio; es decir: él expresaba por dónde iba y lo que no le parecía bien de lo que hacían los demás, pero condenar a quienes pensaban y actuaban de otra manera.
 Pablo VI, el Papa más intelectual del siglo XX —y ha habido muchos— ofrece datos, pero que cada uno tiene que resolver bien en conciencia. 

Juan Pablo II, en sus dos primeras encíclicas sociales volvió a la condena, como había hecho en Polonia. Pero al caer el marxismo percibe que es absurdo decir que tanto el capitalismo como el marxismo son malos, dado que este último ya no existía. Por otra parte, se da cuenta de que la condena es un poco irrelevante, cuando cada individuo no somos ni el capitalismo ni el marxismo. Y sobre todo, se dio cuenta de que muchas veces las condenas lo único para lo que habían servido era para dar “munición” a gente que no es creyente…

Cuántas veces ha ocurrido que, cuando un obispo ha pedido reformas sociales, le han acusado de marxista precisamente aquellos a quienes no les importa la Iglesia; o al contrario, si ha acusado al capitalismo de injusto y perverso, lo han utilizado aquellos que no quieren para nada el progreso de la Iglesia sino únicamente sus propios intereses.

Por eso, y sobre todo porque ya en el año 89 ha caído el Muro de Berlín, lo que hace en Centésimus Annus es mucho más fino. Yo tengo la sensación de que, a pesar de que ha pasado mucho tiempo, esto no lo sabe el pueblo cristiano, sino que sigue pensando de un modo más simple: capitalismo no, marxismo tampoco… Sin embargo, lo que dice el Papa en Centésimus Annus es que el capitalismo, como sistema económico, tiene cinco elementos: la libertad, la empresa, el mercado, la propiedad privada

Y además hay otras "pequeñas discrepancias"

- Usura: Antes se condenaba y hoy no. Esta condena (Concilio de Viena 1311) fue una de las causas de que los bancos prestamistas estuvieran siempre en manos de judíos.

- Pena de muerte: Francisco acaba de cambiar la doctrina de la Iglesia al respecto.

- Inmaculada Concepción: Santo Tomás no creía en ella. Hoy es dogma.

- Cremación: antes no se permitía, hoy sí.

- Requisitos para la comunión: El ayuno ya no es necesario y hace bien poco no se permitía comulgar a las mujeres en el momento de su menstruación. 

Y como estos hay muchos más cambios.

Analizando esto, que son hechos y no opiniones....¿Se puede seguir defendiendo que la doctrina de la Iglesia no ha cambiado, que la sacrosanta tradición es inmutable? 

Obviamente no. Al menos no para una mente intelectualmente adulta.

Y el que Francisco opte por la reconciliación con los cismáticos en vez de por su condena, por mucho que fastidie a los talibanes ultra católicos, es un signo de esperanza.

Comentarios

  1. En todos los ámbitos lo que hoy se llama tradicional o bien esta recién inventado, que se dan casos, o ha variado tantas veces para ceñirse a los vientos que hace falta una cara muy dura para proclamarlo inmutable.

    ResponderEliminar
  2. Pero los ultras necesitan que sea no solo inmutable sino tradicional.
    Si no, están perdidos
    Son ellos quienes proclaman que fuera de la Iglesia no hay salvación.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Se modera solo para que los friki fachas que comentan traten de ser más inteligentes. Sólo se borran los comentarios mas prescindibles.
Por cierto Juanma (es mi troll favorito) siento que te hayas arruinado, pero es motivo de alegría que tu mierda de música ya no se escuche.
Una razón más para dar gracias a Dios.

Entradas populares de este blog

Maria de Nazareth

DECALOGO DEL FRIKI FACHA ULTRA CATÓLICO

DEBATE SOBRE TEISMO Y NO-TEISMO